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| Megaproyectos para las transnacionales pero nada para las necesidades de las comunidades indigenas Motilón Barí |
Santos anuncia Conpes para el Catatumbo con mediación clientelista
Horacio Duque Giraldo
BOGOTA / El
gobierno nacional en cabeza de Juan Manuel Santos anunció en días recientes, la
expedición de un Conpes para región del Catatumbo, localizada en el departamento
de Norte de Santander. Se trata de una estrategia que se establece en el
Consejo Nacional de Política Social, en la que se determinan programas,
proyectos y acciones puntuales con cifras, indicadores y metas concretas para
atender diversos problemas sociales y territoriales.
El Catatumbo es
una extensa región del departamento de Norte de Santander, cuyo eje principal
es el río Catatumbo, el cual tributa sus aguas al lago de Maracaibo; se trata
de una geografía transfronteriza, de enorme importancia en las relaciones de
Colombia con Venezuela. En su territorio se encuentran los municipios de Tibu,
Sardinata, Hacari, La Playa,
Teorama, Convención, el Carmen, Abrego, San Calixto y Ocaña.
En su
jurisdicción se encuentran la comunidad indígena Motilón Barí, organizada en
dos resguardos: a) el Caricachaboquira, con 13 mi hectáreas y b) el
Motilón Barí, con 108 mil hectáreas, además de dos asentamientos donde habitan
23 comunidades con 3130 personas. Comunidad que, por lo demás, es desconocida
olímpicamente por el gobierno en su estrategia fronteriza.
EL CONPES APROBADO ES POR UNA CIFRA de
medio billón de pesos, que se invertirán en obras de infraestructura, vías,
educación, vivienda y proyectos productivos. Según lo dicho por J.M Santos se
darán inversiones en el sector energético, para electrificación rural, tendido
de fibra óptica e infraestructura de establecimientos educativos y apoyo a la
estrategia asistencial Red Unidos. Las inversiones viales comprende la
ampliación y pavimentación de la carretera que lleva a Tibu, así como la vía
Cucuta-Sardinata-Ocaña.
El documento
Conpes incorpora 66 acciones concretas en materia de acueductos y
alcantarillados para Tibu y la
Gabarra.
Sin embargo, las
autoridades locales y las comunidades de la Región, demandan la atención prioritaria en
problemas agudos que afectan las condiciones de vida de los pobladores. En tal
sentido solicitan la construcción de una vía ferrea que le de salida al
Catatumbo; agilizar el proceso de restitución de tierras; la construcción del
Centro de Innovación Social donde funcionara el Sena y varias universidades; la
construcción de un mega colegio en la Gabarra; el mejoramiento de la red vial
terciaria; la organización de un banco de maquinaria que consiste en una
trituradora, tres volquetas, un vibro compactador, una motoniveladora y una
retroexcavadora; el mejoramiento de la red publica hospitalaria, para lo cual
se necesitan ambulancias con sus respectivo equipo paramedico para atender los
corregimientos de Pacelli, la
Gabarra y Campo Dos; la dotación de equipos y recursos
humanos para el hospital San Jose; acciones prioritarias para el saneamiento
básico que implica el cambio de toda la red del plan maestro de alcantarillado
del perímetro urbano de Tibu, con un costo
de 10 mil millones; la construcción de la nueva planta de captación para el
acueducto por 3500 millones de pesos; la construcción del acueducto de la Gabarra, por 3500 millones
de pesos y el de Pacelli, por 2500 millones de pesos; la instalación del
servicio de gas domiciliario, por 10 mil millones; y la instlación de la
autopista de Internet, para atender los requerimientos en materia de educación,
salud y gestión administrativa de las autoridades locales.
LA
CUESTIÓN ES QUE
TODAS ESTAS DEMANDAS urgentes de las comunidades del Catatumbo, no figuran
en la agenda del Presidente del Senado Juan Manuel Corzo, quien es el promotor
del Conpes ante las altas esferas gubernamentales en Bogota, porque ellas no
cuadran en su esquema de operación clientelista.
Lo que si
resulta útil a su poder gamonalicio, que incluye una amplia red de presupuestos
y entidades estatales en Norte de Santander, como la Corporación Autónoma
de Norte de Santander Corponor, son las megaobras con cuantiosos presupuestos
para ser asignados de manera discrecional.
A los jefes
politiqueros del santismo, la unidad
nacional y del sempiterno bipartidismo liberal conservador, lo único que
preocupa es la continuidad y ampliación de su podrido y oscuro poder
familiar/clientelar en las regiones, desconociendo en este caso a miles de
campesinos e indigenas que solo reciben violencia, atropellos, humillación y
saqueo de sus escasos patrimonios comunales.
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| Los recursos naturales al servicio a las transnacionales. |
EL CONPES ANUNCIADO PARA EL Catatumbo
será otra fuente de riqueza y poder de los poderes tradicionales, en este caso
representados por don Juan Manuel Corzo en Norte de Santander, con abundante
paramilitarismo violador de los derechos humanos.
Las comunidades,
las organizaciones populares y las fuerzas progresistas de la región del
Catatumbo deben exigir transparencia y eficacia en la inversión de dichos
recursos, incorporando, entre otros los 210 mil millones de regalías que van a
ser enviados con el nuevo modelo de transferencias aprobado, después de que en
los últimos años tales recursos apenas alcanzaban la limitada cifra de los 70
mil millones de pesos. Acá se necesita la acción permanente de las veedurías
ciudadanas y de los comités de control ciudadano, para que ejerzan la
vigilancia sobre el gasto público programado con el Conpes/Catatumbo
Conviene que las
organizaciones populares y sus lideres organicen eventos para examinar dicho
Conpes y el cuadro de necesidades que hacen parte de la problemática regional
fronteriza.
