El bombazo en el norte de Bogota ayer que casi acabó con la vida del ex ministro de Justicia y del Interior de la administración de Uribe 2002, Fernando Londoño. El ex ministro se hizo famozo y rechazado cuando propuso que el actor de la guerra en Colombia, las FF.MM., tendrían facultades de hacer los levantamientos de sus enemigos en el campo de batalla, que posteriormente se veía en los "Falsos Positivos", en donde campesinos, jovenes, desempleados fueron asesinados por la mencionada institución que caracterizó el hecho como "guerrilleros caídos en combate con el ejército". Pero el pueblo, en un referendo, lo rechazó. También impuso estado de sitio a lo largo de los oleodúctos de las transnacionales como la Oxy, desde Arauca en el sur-occidente de la fronterna con Venezuela hasta la costa del Caribe en el norte. Londoño representa la guerra, el fascismo, aliado estratégico con el monstruo paramilitar, empresario y ladron que robó millones de dólares de la empresa estatal petrolera Ecopetrol. Ahora es víctima en la guerra psicológica en Colombia por los actos de sus propios compinches. |
Domínico Nadal, NotiColombia
Press
Ya van dos bombas puestas por
ellos mismos. Qué digo, cuatro. El
Nogal, la Escuela
Superior de Guerra, Caracol radio y la “contra Fernando
Londoño Hoyos”. Es un arma que usan los detentadores del poder. El Terrorismo.
Ya pasan del Terrorismo de Estado al Terrorismo ramplón.
En Irak vemos cada día las
bombas puestas la mayoría de ellas por miembros pagos de “organizaciones de
resistencia”. Y todas ellas matan civiles indefensos, inermes. Que se suman al
más del millón de irakíes asesinados por las tropas de ocupación de USAmérica.
Y vemos lo que produce la acción devastadora de los bombazos.
En Colombia vemos a la
ultraderecha colocando bombas para conseguir lo que no han podido porque el
pueblo los aborrece. En El Nogal consiguieron que la ministra de defensa de esa
época se le ensoparan las panties y los dejara quietos para seguir haciendo sus
corruptelas en las fuerzas armadas colombianas. Con el auto-atentado de la Escuela Superior
de Guerra trabaron un supuesto viraje de Uribhitler hacia la paz. Puro cuento
del “gallo capón”. Por qué nunca dieron con el monito-rubio que puso la
camioneta en el parqueadero de esa Escuela? Con el atentado de Caracol radio
todavía los están buscando como en el vallenato ese de Escalona (otro que le
gustaba paraquearse) que decía que “nadie
sabe quién es el ratero, pero todos saben quiénes pueden ser”.
Y ahora, éste contra Londoño.
Un individuo de los más aborrecidos por el pueblo colombiano. Ladrón de cuello
blanco e ideología de extrema derecha. Ahora le dan del mismo caldo que él le
recetaba a los pobres colombianos que osaban denunciarlo. Ja, qué ironía! Sus
viejos amigotes le dan tremendo zurrón, pero no tan duro para que lo mate.
Y, claro, como en Irak quedan
los regueros de muertos, destrozos y vidrios rotos, que son tan impactantes a
los ojos de la “opinión ciudadana”. La pregunta del millón es: A quiénes
favorecía ese bombazo? A los militares? A Uribhitler, ese nefasto heredero de
Pablo Escobar Gaviria. A la “mano negra”? Y qué son todos esos juntos sino una
caterva de reaccionarios decrépitos a quienes el pueblo colombiano los aborrece
hasta lo infinito?
El “camino de Irak” no debe
ser permitido por el pueblo colombiano. La lucha es por la Paz en contra de los sectores
oligárquicos que recurren a lo que sea para continuar llevando a Colombia por
el camino de la guerra eterna, la eterna guerra eterna. La verdad es que es a
la oligarquía a quien le sirve el actual estado de cosas. Ya se empezaron a ver
los resultados de los TLC firmados por la mancuerna oligárquica
Uribhitler-Santos. Ya se le ve el rostro asesino de Santos que lleva cientos de
muertos en su mandato.
Y ellos saben que el pueblo
no aguantará por siempre que lo pisoteen. Ya lo están viendo con la Gran Marcha Patriótica
y en su desesperación inaudita comenzaron la matazón de los integrantes de esa
forma de organización popular, al igual que hicieron con la Unión Patriótica.