domingo, 13 de mayo de 2012

La conspiración paramilitar Mancuso-Uribe para matar y derrocar a Chavez

¿No te recuerdas, Álvaro, dice con tono casi triste el ex jefe paramilitar que dice que Uribe fue parte de la conspiración en contra el pueblo vecino y su presidente en mayo de 2004. Santos, en esa época, fue uno de lo más declarados enemigos en contra Chavezs y no perdia la oportunidad de echar su odio en contra el proceso bolivariano.


¿Quien y qué dice que Santos no es igual como Uribe?

La conspiración paramilitar Mancuso-Uribe para matar y derrocar a Chavez


Por Correo del Orinoco:

Libro sobre el caso Daktari revela la participación de Capriles y Uribe Vélez,

Las investigaciones arrojaron que la operación costó alrededor de 10 millones de dólares y fue financiada por empresarios venezolanos con apoyo de Washington, informó Miguel Ángel Pérez Pirela T/ Manuel López F/ Héctor Rattia
Caracas
Los hechos y las evidencias recabadas por los organismos de inteligencia del Estado venezolano apuntan a que el expresidente colombiano Álvaro Uribe Vélez y el candidato presidencial opositor Henrique Capriles Randonski están involucrados en la invasión paramilitar al país desvelada el 9 de mayo de 2004.

AUC (Mancuso), Uribe y Capriles, paramiliarismo, estado colombiano y oposición fascista venezolana, alianza estratégica dibujados por el Pentágono en los planes para matar a Chávez, frenar y derrotar la Revolución Bolivariana. ¿Pero que dice que Santos, un enemigo ciego a este proceso, juega diferente?

Esta es la conclusión de la investigación que presentaron el intelectual venezolano Luis Britto García y el filósofo y conductor del programa Cayendo y corriendo que transmite VTV, Miguel Ángel Pérez Pirela, en el libro L a invasión paramilitar. Operación Daktari, bautizado ayer en teatro de la Escuela de Formación de Oficiales de la Guardia Nacional (Efofac), en Fuerte Tiuna .
La presentación de la obra sobre el caso de los paramilitares colombianos capturados en la finca Daktari por las autoridades venezolanas, estuvo presidida por el titular del Ministerio del Poder Popular para Comunicación e Información (Minci), Andrés Izarra, el exvicepresidente Ejecutivo, exministro de Defensa y periodista, José Vicente Rangel, el director del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), Miguel Rodríguez Torres, el presidente de la Agencia Venezolana de Noticias (AVN), Freddy Fernández, y los autores.
“Es un hecho que muestra la cara más vil de la oposición y forma parte de una serie de atentados en contra de la democracia que la Revolución Bolivariana ha sabido sortear a lo largo de todos estos años”, expresó el ministro Izarra. Los medios privados trataron de invisibilizarlo y banalizarlo, a pesar de las cuantiosas evidencias de los hechos. “Gracias a la eficiencia y eficacia de nuestros grupos de inteligencia que, sin echar un tiro ni provocar una muerte, lograron desmantelar una fuerza militar considerable entrenada para matar y actuar contra el Jefe del Estado. Los agarraron con las manos en la masa antes de que ocurriera”, destacó.

Vestidos como cualquier paramilitar colombiano fueron capturados con las manos en la masa.

Son planes que están vivos, escondidos bajo la manga de algunos sectores de la oposición venezolana, alertó Izarra: “Sin duda alguna el militarismo sigue siendo una amenaza para el país y para todo el continente”.
La operación buscaba atentar contra la vida del Presidente y causar un caos en el país que podría haber desembocado en una guerra civil, agregó en su intervención Pérez Pirela.
El presentador de VTV aseguró que es un atentando que involucra a personas relacionadas con el golpe de Estado de abril de 2002, como el exalcalde metropolitano Alfredo Peña y el actual candidato presidencial Henrique Capriles Radonski, quien según los documentos presentados en el libro brindaba protección a los paramilitares como alcalde del municipio Baruta. También se incluye al expresidente colombiano Álvaro Uribe Vélez. El costo de la operación ascendió a unos 10 millones de dólares y fue financiada por empresarios venezolanos con apoyo de Washington, destacó Pirela.
“Hay un hilo conductor de los sucesos en la hacienda Daktari que llevan a la violencia opositora de hoy. Es fundamental incluir todos estos hechos en el análisis político y no olvidarlos. Es indudable que el personaje central de este hecho es Álvaro Uribe”, destacó José Vicente Rangel.

Las baracas en donde dormia los paramilitares colombianos.
 Britto García fue más allá:
“Los medios se prestaron para el apagón comunicacional y debemos evitar que lancen estos hechos al olvido”. LA OBRA El libro busca rememorar estos hechos y enlazarlos con el presente. El 9 de mayo del año 2004, en una operación relámpago, los cuerpos de seguridad del Estado venezolano encontraron en la finca Daktari, ubicada en el sureste de Caracas en el municipio El Hatillo, a un grupo de 150 hombres que resultaron ser, después de realizadas las investigaciones, reservistas del Ejército colombiano y paramilitares que estaban siendo entrenados para crear el caos en el país y atentar contra la vida del primer mandatario, Hugo Chávez Frías.
El libro está con formado por entrevistas, textos analíticos y documentos anexos que evidencian el apoyo y protección de las autoridades locales opositoras.
La publicación es un esfuerzo editorial contra el olvido y la violencia opositora Es una investigación que sale en un momento oportuno , ya que el jefe paramilitar de las Autodefensas Unidas de Colombia, Salvatore Mancuso, ofreció unas declaraciones a una radio colombiana el viernes que ratifican lo que en la obra se revela.
“Mancuso, que está siendo juzgado en Estados Unidos, señaló ayer que políticos, militares y empresarios venezolanos fueron a Colombia a pedirle apoyo para dar un golpe de Estado y atentar contra la vida del presidente Chávez”, expresó el ministro Izarra.
“Este esfuerzo editorial, publicado en tiempo, es un aporte a la conciencia de los venezolanos”, destacó el ministro, quien precisó que se están editando 20 mil ejemplares.